calendario de adviento muy handmade

Hoy es un lunes un poco especial porque es un lunes que viene cargado de comienzos: empieza una nueva semana y empieza también un nuevo mes, el mes de diciembre, y con este mes empieza la cuenta atrás para lo que es el adviento, o sea el nacimiento de la figura cristiana de Jesús. En nuestra casa no creemos en ninguna religión, pero el espíritu navideño nos mola y lo vivimos como una ocasión de crear juegos a tema y de pasar con alegria uno de los meses más oscuros del año.
Y así hoy, como todos los años,  hemos empezado a buscar que sorpresita las hadas de la Navidad han venido a dejar en nuestro calendario de adviento handmade. Nuestro calendario es un poco peculiar: lo realicé hace 5 años, y fué en realidad el comienzo del proyecto de Milada, sin que yo lo supiera ;)

Está hecho integralmente de fieltro: nació como un tren hecho por 1 locomotora y 4 vagones, cada uno de 6 compartimentos, e iba colgado en un paisaje de fondo lleno de colinas y de nubes fuxia (así le gustaba a mi pequeña Mirella!). Cada compartimento lleva bordado un sujeto, a veces relacionado con la Navidad, otras veces no.

Este año hemos ido reformando un poco ese tren por cuestiones prácticas, la primera: el espacio. Ahora el tren ocupa muuuucho muuuucho menos y es mucho mas fácil cogarlo y descolgarlo. La segunda razón ha sido la necesidad de duplicar la cantidad de bolsillos para que también Serena pudiera gozar de ese momento de magia junto con su hermana mayor. Y así hablando con Mirella de como podíamos hacer para resolver ambas cuestiones hemos decidido transformarlo en un tren hotel!

Lo que más me gusta de este nuevo calendario de adviento es que está cosido a cuatro manos: Mirella se ha aventurado con la máquina de coser y ha preparado el dobladillo de la tela sobre la cual hemos luego cosido juntas los bolsillos. Las costuras no son rectas, y las puntadas no son exactamente equidistantes, pero para mi son hermosas como ninguna otra costura: las horas que hemos pasado juntas en mi taller preparandolo todo, la atención que le puso Mirella al trabajo, las ganas de aprender a usar esa máquina que tantas horas utiliza su mamá... eso tiene para mi un valor inmenso!
Y a parte del rato que se tiró cosiendo, Mirella puso de lo suyo también decorando cada letra del nombre del calendario de adviento: trenhotel!  
Ayer pasamos la tarde así: todos reunidos trabajando para ese proyecto, preparando lo que le dará una sorpresa a las pequeñas de la casa durante el comienzo de estas fiestas. Vivimos plenamente lo que para mi es el espíritu de la Navidad!
Y vosotras? Teneis un calendario de adviento en vuestras casas? Cuentenlo y enlacen fotitos que me encanta verlos!!!